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Copiar o no copiar: el nuevo dilema hamletiano

7-noviembre-2006.- 1. Introducción: Dediqué a la enseñanza 52 años. Consecuentemente, hice y vi hacer muchas cosas, entre ellas, la copia en las pruebas escritas. Sorpresivamente, al navegar por Internet, he quedado patidifuso, totalmente desconcertado, al leer un artículo petardista. Mi primera intención fue difundirlo en bruto pero no pude resistir la tentación de intercalarle comentarios personales

2. La noticia de base El 18 de mayo de 2005, el periódico "The New York Times" insertó una nota alarmante: los estudiantes universitarios aprovechan recursos tecnológicos para copiar en sus exámenes cada vez más frecuentemente y con mayor habilidad. Ya es casi habitual que, mientras rinden las pruebas escritas consulten Internet o se intercomuniquen con compañeros o personas en el exterior requiriendo auxilio. Las medidas represivas, tales como la prohibición de entrar al aula con celulares, agendas electrónicas y laptops, o bien, revisión de tales equipos cuando se permiten, han fracasado rotundamente debido a la astucia de los jóvenes y/o el displicente control de los profesores. Por tal motivo algunas instituciones han comenzado a aplicar nuevos procedimientos: > instalación de cámaras ocultas de TV en las aulas (Universidad Brigham Young, Salt Lake City, Utah)> software para interferir programas usados por los alumnos durante el test (Universidad de Butler, Indianápolis)> bloqueo de memorias y accesos a Internet y/o correo electrónico [Universidades de California (Los Ángeles) y Nevada [Las Vegas]).Ver:                                  http://www.gnn.tv/headlines/9184/Colleges _Chase_as_Cheats_Shift_to_Higher_Tech ]

3. Una insólita réplica  Días después, el blogger Ira Socol, especialista en "Tecnología aplicada a la educación" en la Facultad de Educación (Universidad de Michigan) arremetió contra dicho artículo con otro aparecido en el boletín "Inside Higher Education" Nota: sus datos personales se consignan más abajo, Ver:http://indoecencias.blogspot.com/2006/05/es-tan-maloque-los-alumnos-copien-o.html) 
  
Hete aquí el articulito de marras: 
 Dejen de cazar a los tramposos tecnológicos
 por Ira Socol 
Leí en el "Times" detalles de la lucha llevada a cabo por profesores universitarios contra nuevas formas de copiarse, basadas en el uso de tecnologías modernas. Y me indignó el tono de consternación con que hace referencia al hecho, insistiendo en el colapso de la moralidad.  [¡Attenti: no le preocupa la copia sino su tratamiento]. 

En estos momentos, en el ámbito educativo se combaten la copia, las drogas, las trampas en la admisión y promoción de alumnos, los plagios en las investigaciones,... y muchas otras deshonestidades. Sin embargo, estimo que deben ponderarse la apreciación de los daños potenciales causables en cada caso. El mayor peligro no reside en el comportamiento estudiantil sino en el tiempo malgastado por sus profesores para erradicar herramientas tecnológicas en los exámenes, sin darse cuenta de que el verdadero problema es otro.[Maniobra de transferencia: la culpa se tras- pasa del alumno al docente].

Yo doy la bienvenida no sólo la Tecnología sino también a los nuevos métodos de copia.[oh la lá... ¿apología del crimen?] 

La sublevación estudiantil forzará la adaptación de los docentes a la realidad y, entonces, enseñarán mejor, facilitarán el aprendizaje y perfeccionarán las evaluaciones. [Bien, muy bien... gracias a la copia se impulsará el ajuste del sistema universitario]

En exámenes tomados en la Escuela de Periodismo se ha califica la ortografía. Es una actitud condenable. Pero no es un caso aislado porque, a lo largo y a lo ancho del país, se exige la memorización y la recitación de datos triviales. En todas las áreas educativas -excepto unas pocas- [no las especifica] se sobredimensiona la repetición de información en vez de estudiar que sucede fuera del aula. ¿Por qué un profesor de Periodismo, volviendo al caso precitado, se ocupa de aspectos secundarios e inútiles, como la ortografía, cuando en el 2005 las máquinas de escribir y las linotipos son artefactos obsoletos? [Una en broma: ¿para ké que korno Zirve excriviR vien? La livertá ez Livre; exkrivo komo Ce me chifla.  La segunda en serio: se incurre en reduccionismo  si un solo ejemplo explica una situación  compleja].

Actualmente los periodistas emplean grabadoras, DVD, pendrives, computadoras y teléfonos de bolsillo, iPods,... Redactan con procesadores de texto que disponen de corrección ortográfica automática. En mi opinión, ya no hay que enseñar ortografía sino como la configuración de la corrección computarizada porque ése será el instrumento por los egresados para ejercer adecuadamente su profesión.
Desde hace mucho impera en las universidades un pequeño y sucio secreto: debido a los malos profesores, los estudiantes se copian. Si el objetivo del curso es memorizar una lista sin sentido de hechos y si, además, en la evaluación se incluyen los errores ortográficos, los estudiantes copiarán. Más aún, quizás deben copiar.[Socol sigue batiendo el mismo parche y ahora sostiene una falsedad porque los alumnos copian independientemente de la calidad del profesor.  Y sigue exagerando la importancia dada a la ortografía,circunstancial en la aprobación de contenidos].

Aplaudo la carta remitida al "Times" por el prof. Daniel Newsome, del John Jay College:"Si en el mundo real comemos chuletas de cerdo, ¿por qué no comerlas también en las escuelas? La vida es demasiado corta como para gastarla oponiéndose a realidad y luego, quejarse constantemente del resultado. Adoptemos las copias... pero démosle quizá otro nombre"      (Párrafo de antología. Primero, un inopinado argumento alimenticio; luego, la legitimización de la copia si se ampara bajo un sinónimo]. 

Lo importante es procesar información y buscar soluciones creativas. Si los estudiantes aprendieran a elaborar síntesis relevantes disminuiría la copia o su práctica se dificultaría. Tenemos que enfrentar los hechos y convencernos que no podemos saber todo de todo. Cuando necesitamos una respuesta rápida y exacta a una pregunta y no nos acordamos de lo que deberíamos saber, recurrimos a Google para encontrarla. O, si no, llamamos a alguien por teléfono. O le enviamos un mensaje SMS o un e-mail requiriendo ayuda. Esto no es copiar sino emplear eficientemente la tecnología a nuestro alcance. Es una conducta que, dentro del aula, se tilda de "incorrecta", mientras fuera de ella es "inteligente".  [Socol defiende el "corte y pegue" pero no aclara cómo actuar si Google carece de información o la suministra con equivocaciones]. 
Teléfonos, PC e Internet son elementos indispensables para triunfar en un mundo regido por la información. Pero, paradójicamente, se los prohíbe dentro de las aulas.[No, Socol, no dentro del aula sino durante los exámenes]  

No se enseñan las ventajas que brinda Google ni cómo se envía un SMS. Se insiste en enseñar a continuar expresándose con métodos y lenguajes solamente válidos académicamente. No es de extrañar, entonces, que dicha preparación no asegure el éxito fuera de la universidad. 
Un decano de la Universidad de Nevada (Las Vegas) ha afirmado "Si los alumnos dedicaran tanto tiempo en estudiar como el gastado  en copiar, todos se recibirían con diplomas de honor".      [¡Hurrah!, al menos hay un fulano que no comparte las peregrinas ideas socolianas].    
Yo le pregunto a ese decano: para obtener esos diplomas, ¿los estudiantes tienen que re-escribir la Wikipedia?  [Socol ignora u oculta que en las universidades norteamericanas se recomienda no extraer datos de Wikipedia ni citarla en las bibliografías de tesis sin comprobar previamente su veracidad.   A menudo sus aportes son erróneos, incompletos y/o sesgados.¿Tendrían que deletrear correctamente cada palabra? ¿Tendrían que regurgitar penosa y lentamente la información que un usuario de Internet consigue en 30 segundos? Quizás ejercitar la copia será lo más útil de todo aprendizaje porque escribir con ortografía impecable o recordar términos científicos, fórmulas químicas y fechas históricas de nada valen. Por eso se debe adiestrar a los estudiantes en la búsqueda de información en Internet, incitándoles a comprobar su calidad y su precisión, la cita de fuentes y el análisis de fuentes de otros autores para determinar si han cometido plagio.[Flagrante contradicción: el estudiante puede copiar a raja cincha pero, ya profesional, debe denunciar las copias ajenas). A tres días de publicado un artículo en la portada del "Times", el editor se retractó. Admitió que la gaffe se habría evitado si el periodista hubiera verificado la noticia en el Google. Este hecho demuestra la imperiosa necesidad de cambiar los programas de estudio 
 [Vaya, vaya, el efecto mariposa. Pongamos patas arriba la universidad porque un periodista porque un  periodista se tragó un buzón. Pensando mal y pronto,  ¿Google coimeará a Socol para que lo publicite?]. 
Cabe eliminar toda discriminación en la educación. Cuando las escuelas luchan contra la tecnología  [Y dale con los mismo: no se prohíbe la tecnología sino su uso fraudulento] obstaculizan la educación de gente que opera de manera diferente a la de los profesores. La tecnología es imprescindible que todos ingresen y permanecezcan en las universidades con buenos resultados en estudios coparticipativos  [De acuerdo, completamente de acuerdo. Si todos se  copiaran todos obtendrían 10 y felicitado].  La tecnología en manos de todos los estudiantes permite que los impedidos y con déficits funcionales puedancursar la universidad
[Argumento sentimentaloide oblicuamente esgrimido.La tecnología pone el conocimiento al alcance de los incapacitados pero no los libera de la obligación de estudiar y aprobar en paridad con sus congéneres normales. De no ser así se incurriría en discriminación].  Por ello, el problema no está en la copia sino en las técnicas de enseñanza y evaluación. No se resolverá hasta que los profesores se convenzan de que la comprensión de conocimientos y la habilidad para trabajar con ellos dependen de la Tecnología. La información accesible mediante Google, una SMS o una llamada telefónica, no merece ser aprendida de memoria ni utilizada en las evaluaciones porque siempre, y sin mucho esfuerzo, puede ser obtenida rápida y eficientemente.  [La conclusión es más de lo mismo. Al fin al cabo, ¿hacia qué apunta Sokol[: ¿admisión de copia? ¿promoción de  Tecnología? ¿reforma del sistema universitario?]. 

3. Conclusión propia
Tal vez exagero demasiado y asigno relevancia a opiniones de un fulano cuyo blog a lo mejor, ni su madre lee. Sólo remarco cuatro riesgos: 
1° el mito de Internet, la creencia de que Google, Yahoo, Opera e tutti quanti son infalibles y sirven en bandeja el conocimiento habido y por haber.  
2° la estimación de la memoria como actividad superflua y deleznable. Si no se la entrena adecuadamente ¿recordaré las operaciones necesarias para que Google me dé la información demandada?  
3° la validación de la copia como medio para demostrar conocimiento  
4° la despenalización de la copia. En definitiva, conseguir información y, por extensión, otro objetivo por cualquier vía, despreocupándose de su aspecto ético. Esto es: importa el fin y no el medio para lograrlo 

4. Perfil de Ira Socol 
Zoclo es prolífico: en Google tiene numerosas páginas de su autoría,con artículos variopintos, fotografías tomadas en sus viajes, propaganda comercial, etc. pero:- No indica edad. Presumo que ronda la treintena.- No menciona estudios, salvo "certificado de especialización" expedido por la Universidad de California (Northbridge). Aparentemente cursó "Aplicaciones  de la Tecnología para la asistencia de discapacitados" pero no hay constancias de duración y/o nivel del título. - Implementó un sistema computacional con facilidades para discapacitados (campus de la universidad de Grand Valley) e hizo algo semejante para estudiantes adultos en Gran Rapids.- Se desempeñó por breve lapso como oficial en la policía de New York.- Desde 1998 trabaja en el Servicio de Rehabilitación del estado de Michigan como asesor en Tecnología, diseñando redes computacionales y facilitando -en todas ellas- el acceso de los discapacitados.  - No hay registro sobre la naturaleza de su cargo docente ni de su antigüedad en el mismo. - Todas sus publicaciones son de divulgación.-  Declara que sus actividades son: ser, hacer, observar, desear y soñar, y que tiene experiencia en redacción de cuentos de ciencia-ficción. Le interesan la política de izquierda (sic), el fútbol, la natación, las películas antiguas y los hechos sobrenaturales. 

Jorge O. Milone para Curiosamonserrat.com.ar
milonej@speedy.com.ar

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